6 de febrero de 2008
Caminaba por Madrid escuchando el ruido de mis tacones. Tac-tac-tac-tac. Un silencio y, de nuevo, tac-tac-tac-tac. Me gusta Madrid. Es la única ciudad, el único sitio, en el que he permanecido más de cinco años. Me sorprende. Siempre fui de allí para acá. Barcelona-Zotes-Trobajo-Zotes-León-Salamanca y Madrid, última parada, por ahora. De todas partes y de ninguna, la melancolía me acompaña en cada viaje, pero hoy, hoy me he sentido plena, con raices afincadas, pero sin dolores, con ganas de posar mis ojos delante, donde deben, y no atrás, donde siempre me los suelo dejar. Será Madrid, no sé, será el día, que me sentó bien, quizá sea eso, sí, quizá.
0 Comments:
Post a Comment
<< Home