Nunca te diré mi nombre

Me siento una romántica perdida en el casquivaneo de la vida; me sé una niña en el mundo de los niños; me pierde el sonido de unos tacones y una minifalda bonita y una sonrisa en un amigo y un beso largo y un buen libro y un chico guapo, en fin, aquí escribo los retratos de mi inconsciencia, porque ser niño es igual a inconsciente cuando pasas los 25...

Thursday, November 09, 2006

9 de noviembre

Ha pasado un mes de aquel paseo. 31 días de dudas, de devaneos, lágrimas y casquivaneos. Pero sobre todo dudas. Sobre mi vida, mi pasado, mi futuro, mi trabajo, mis amores, mis sueños, mis fronteras y mis límites. Lágrimas, todo es neblina. Todo es miedo. Todo es una lucha constante contra mí misma y este estúpido mundo que me he montado. A veces me gustaría meterme debajo de la cama, desaparecer, que las sábanas me tapen y borren todo lo que no debí haber hecho. A veces me gustaría desaparecer, así sin más, huir de mi misma y mis estupideces, huir, huir de mí y de esta estúpida vida que es la mía.
Hoy estoy triste, sí.
Llevo 31 días así.

1 Comments:

Blogger JASTADIT said...

¿Por qué has emigrado al país de la tristeza y la duda? Creí que empezaba a brotar en tu cara una sonrisa y marchitó antes de ser flor. Ya sabes que estoy aquí, al otro lado del rio, solo silba y vendré a buscarte.
Un abrazo muy fuerte.

8:21 AM  

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